Del 28 de junio al 2 de julio he estado en compañía de Silvia, Neco y Dana en el sector más meridional del Sistema Ibérico, en concreto en la Sierra de Albarracín y en la Serranía de Cuenca, a donde acudimos el día 30. Nuestro campamento base estuvo en el bonito pueblo turolense de Albarracín. Aunque ha sido un viaje de relax y turismo hubo también tiempo para disfrutar de la naturaleza.
El miércoles 29 de junio hicimos un recorrido por la Sierra de Albarracín, disfrutando de algunas observaciones interesantes en el círculo Noguera de Albarracín, Orihuela de Tremedal y Bronchales. El hábitat estaba compuesto por extensos pinares de pino silvestre, con algunos sectores con encina, roble melojo, enebro común y sabina albar. También roquedos, zonas de cultivo de secano en el fondo de los valles y algunas áreas deforestadas y con roquedos.
En Tramacastilla un grupo de buitre leonado Gyps fulvus permanecía atento desde las copas de los árboles, seguramente atraídos por la presencia de alguna carroña próxima. Un águila calzada Aquila pennata reclamaba desde la espesura del pinar, posada en un árbol seco.
En el puerto de Noguera pudimos observar y fotografiar las evoluciones de una pareja de águila calzada con ambos miembros de la pareja de fase clara. Más adelante veríamos otra pareja más, también con los dos miembros de fase clara, hacia el puerto de Bronchales.
Un poco más lejos una culebrera europea Circaetus gallicus sobrevolaba el lugar en busca de ofidios.
En los extensos pinares camino hacia Bronchales vimos varios grupos de piquituerto común Loxia curvirostra y también algunos ejemplares de verderón serrano Carduelis citrinella. Además de algunos mamíferos como corzo Capreolus capreolus y ardilla roja Sciurus vulgaris.
El broche a la jornada fue la observación de una pareja de águila real Aquila chrysaetos posada en lo alto de un roquedo, acicalándose el plumaje y oteando su territorio desde la cumbre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario