15 de septiembre de 2010

Saja-Besaya

Esta mañana estuve por el Parque Natural Saja-Besaya. Mi objetivo era ver si ya estaban berrando los Ciervos rojos Cervus elaphus e intentar también localizar algún rastro de Lobo ibérico Canis lupus signatus en la zona de campeo habitual de un grupo familiar, desde al menos hace 2 años.

No escuché berrar aún ningún Ciervo, a pesar de ser ya una fecha buena, seguramente las condiciones climatológicas reinantes aún (calor y escasez de precipitaciones que hagan brotar la comida) están retrasando el celo. No obstante, me llegan noticias del valle del Nansa, donde ya berran algunos ejemplares desde hace unos días.





Localicé diferentes grupos de hembras y también un par de grupos de machos, de 5 y 6 ejemplares resectivamente, en una zona típica de alta montaña donde suelen permanecer en esta época. No muy lejos, un grupo de 7 Rebecos cantábricos Rupicapra pyrenaica parva se alimentaba en los matorrales subalpinos de arándano y Calluna vulgaris.

Se van formando ya los bandos postreproductores de Bisbita alpino Anthus spinoletta y Pardillo común Carduelis cannabina, preparándose para afrontar el otoño.

En una braña detecto la presencia de un grupo de Buitres leonados Gyps fulvus posados en el suelo. Descubro que están junto a una vaca que ha parido recientemente y que aún lleva colgando restos del parto. Seguramente hayan acudido a los restos de placenta y demás y por si la vaca o el jato tuvieran algún problema. Aparece el dueño y los Buitres vuelan ladera arriba, posándose en una cumbre. Se llegan a congregar hasta 24 ejemplares.
Me desplazo a otra zona en busca de indicios del Lobo ibérico. Recorro un sendero transitado habitualmente por la especie. No tardo en localizar el rastro de 2 ejemplares. Además, otros carnívoros típicos del Parque también han dejado sus huellas en el barro, caso del Gato montés Felis silvestris y del Tejón Meles meles.

En el hayedo están muy activos los paseriformes forestales, con especies como Herrerillo capuchino, Carbonero garrapinos, Carbonero palustre, Camachuelo común o 1 Agateador norteño. También frecuentes Papamoscas cerrojillos en los bordes del bosque y algún Mosquitero musical, ahora en paso migratorio por la península Ibérica.



También en el hayedo, una cabaña de vacas tudancas.


2 comentarios:

  1. hola alejandro,yo tambien estuve ese dia por esa zona,de berrea nada,consegui ver cuatro grupos de ciervas bastante numerosos de hasta 25 ejemplares,10 ,12 y 8,dos de ellos ya estaban acompañados da machos y vi otros dos machos mas solos,mi gran pasion es el lobo iberico pero tras un fugaz avistamiento hace dos meses no doy con ellos.
    enhorabuena por el blog me encanta

    ResponderEliminar
  2. Hola Javier, pues sí que son bastante escurridizos, normal por otra parte con la persecución que sufren. Me alegro que te guste el blog, a ver si coincidimos un día por el monte. Un saludo.

    ResponderEliminar