14 de abril de 2015

Buscando al lobo ibérico

A las 7:20h llego al lugar seleccionado para el aguardo de hoy. Cielo despejado, la Luna aún visible y un suave viento del Sur, aunque la temperatura es de 5ºC. Varios grupos de hembras de ciervo rojo Cervus elaphus se alimentan repartidas por las brañas y matorrales libres de nieve. En el hayedo resuenan los tamborileos del pico picapinos Dendrocopos major y las llamadas del pito real Picus viridis. En una ladera de fuerte pendiente cubierta de nieve, próxima a una cumbre, transita un zorro rojo Vulpes vulpes con su cola en alto haciendo equilibrio para superar la difícil prueba. Vuela un busardo ratonero Buteo buteo y pasa raudo un halcón peregrino Falco peregrinus, ahuyentando a un pequeño grupo de corneja negra Corvus corone.

Pasadas las 7:55h localizo en el borde de una braña un animal que se oculta entre las escobas, es un lobo ibérico Canis lupus signatus. Sale al camino forestal, avanzando ligero, con su típico e inconfundible trote lobero. Después de recorrer un trecho y cuando el camino gira a la izquierda y hacia arriba por la ladera, decide seguir recto, adentrándose en el hayedo, en donde ya le pierdo de vista.

Un picamaderos negro Dryocopus martius emite su reclamo de celo, mientras un par de ejemplares de buitre leonado Gyps fulvus empiezan a patrullar la zona en busca de comida. Hora y media después de llegar recojo la óptica, la magia del amanecer ha vuelto a compensar el madrugón.

3 comentarios:

  1. Gracias Ricardo, lejos para fotos, a ver para la próxima. Saludos.

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  2. Eso seguro! Ese madrugón gratamente recompensado con los sonidos, olores, paisajes y avistamientos del monte.
    Un saludo de 'Ojolince y Sra.'

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