Ayer por la mañana anduve en compañía de Sergio Tejón y Nacho Cloux por el río Ebro, a su paso por el municipio cántabro de Valderredible. El objetivo, localizar zonas aptas con presencia de rastros de pequeños y medianos carnívoros de cara a una salida formativa este próximo sábado.
Detectamos un sector con gran abundancia de rastros de Nutria paleártica Lutra lutra, con abundantes excrementos con restos de cangrejo de río y también huellas en la orilla limosa del río. Era el sitio óptimo. Cuando ya nos disponíamos a abandonar el lugar, para prospectar otro sector, grita Sergio, ¡¡ ahí está la Nutria ¡¡. Efectivamente, un ejemplar de esta especie se zambullía en la orilla opuesta, a plena luz del día, ya cerca de las 12 h. Tras aparecer y desaparecer varias veces, la Nutria se ocultó a nuestra vista río arriba, observándola por última vez en nuestra propia orilla.
La Nutria es un mustélido cuyas poblaciones han aumentando y se han expandido notablemente en Cantabria durante las últimas décadas, una vez que ha terminado la persecución que sufría por el hombre, por estar considerada una alimaña que acababa con las poblaciones piscícolas de nuestros ríos. Afortunadamente, la Nutria se ha recuperado y hoy en día se la puede ver prácticamente en casi todos los ríos y estuarios de la región.
En el río Ebro alcanza una importante densidad poblacional, gracias sobretodo a la gran disponibilidad de alimento, en base a la abundancia de Cangrejo señal Pacifastacus leniusculus además de la riqueza piscícola del río y la presencia de Cangrejo de río autóctono Austropotamobius pallipes en los tramos secundarios.
