31 de octubre de 2011

Atardecer en Pesaguero





29 de octubre, cae la tarde en el valle de Pesaguero. El día ha sido soleado en su mayor parte, aunque fresco y con una ligera helada la noche anterior. El bosque luce sus mejores galas, aunque algunas hayas ya van perdiendo la hoja, seguramente favorecido por los fuertes vientos de componente Sur de días previos.


Las cumbres de Peña Prieta, Curavacas y Picos de Europa ya aparecen teñidas de blanco, primeros presagios del invierno.


Buitres leonados, cuervos, chovas piquigualdas y piquirrojas sobrevuelan las cumbres, mientras un picamaderos negro Dryocopus martius emite su característico reclamo en una cabecera del hayedo.


Va descendiendo el Sol y con él la temperatura. Es la hora de los mamíferos. Varios grupos de ciervo rojo Cervus elaphus se alimentan en los matorrales y pastizales supraforestales, incluidos un macho con su harén. En unas peñas calizas, dos rebecos cantábricos Rupicapra pyrenaica parva buscan comida y protección. Más abajo, en el secreto prado en el hayedo, un gato montés Felis silvestris vigila su territorio de caza, paciente en busca de alguna presa despistada, atareada en estas fechas otoñales en llenar de comida su despensa invernal.


Así cae la noche en la Cordillera Cantábrica, entre reclamos de arrendajo, petirrojos y mirlos, que dan paso al ulular del cárabo común.

No hay comentarios:

Publicar un comentario